Pues vaya porquería dirás... Hasta yo mismo me he sorprendido de ver la lista tan corta de juegos de este Septiembre, pero sin duda obedece principalmente a que las novedades de este mes han sido Azul y Tikal, con resaca de las últimas novedades Hal Pint Heroes y Sushi Go.
Ya después de la LES de Aluche hemos hecho limpieza y estamos en esa fase que pasa del coleccionismo a reducir tu ludoteca con lo que realmente te gusta. Aún queda mucho fondo de armario, pero se nota que hay juegos que ya no salen a la palestra. Bueno, os comento un poco de cada uno de ellos.
Como ya he comentado en anteriores ocasiones y en la propia reseña, este juego ha entrado como cuchillo en mantequilla y sigue cosechando éxito tras éxito allá donde lo saco, entre profanos y eruditos en los juegos de mesa. Una apuesta muy segura. No nos cansamos de jugar.
Como ejemplo definitivo deciros que hasta un radical de MUS (no juega a otra cosa) fue seducido por nosotros y "obligado" a jugar. Entredientes creemos que dijo "pues no está mal". La bomba.
Pues nada, todos los meses aparece... por algo será...
Tremendo juego traído directamente de las LES del cual nos enamoró su estética y sus críticas positivas, además de haber sido nombrado Juego del Año en Alemania. Como veis lo hemos probado y ha gustado bastante. Ahora que tiene truco para sacarnos los cuartos (más info en la reseña).
Perfecto para todos los públicos y muy bonito.
TIKAL (Edición Maldito Games)
El bombazo del mes tras la llegada del AZUL. Aún no tengo reseña, la estoy haciendo con cariño.
Este juego nos entró por los ojos en las LES y me quedé flipado con la estética... y con las pirámides Mayas...
El juego no es que sea la releche pero ha caído bien. Eso sí, tiene mucho entreturno y eso me mata. Pero la verdad es que las veces que lo he jugado ha gustado y mucho. Ya veremos cómo aguanta el tiempo... Tiene pinta de seguir el camino de Terraforming Mars, que también tiene mucho entreturno y larga duración y empieza a coger polvo...
Otro éxito del verano que ya va perdiendo fuerza. Este juego ocasional solo ve mesa en reuniones intrascendentes y probablemente acabe en el maletero del coche para cuando se tercie. Entretiene, pero es como comer patatas. Pocas están exquisitas, muchas ya cansan... (bueno, depende de lo que te gusten las patatas)
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