Esta semana no está mi habitual grupo de jugones, así que se avecinaba una entrada de algún juego vendido o similar. Sin embargo, el jueves subimos a casa de unos amigos no jugones y me llevé el Aventureros al Tren y, revisando imágenes para subir al Blog, me he dado cuenta que el pasado 12 de Julio estuvimos jugando también, pero se me pasó hacer la reseña, así que aprovecho con esta.
Decidí subirme este juego a casa de mis amigos pues es un juego que siempre funciona con no jugones. Para añadirle más dificultad, contaba con la inestimable ayuda y compañía de mi mujer que no le molan nada los juegos y mi amiga Almudena, toda una incógnita. Pero pese a todo, propuse jugar y cuál fue mi sorpresa que aceptaron. Así que nos pusimos manos a la obra.
Tras una breve explicación por parte de mi señora y, mientras preparaba unos mojitos, comenzamos a jugar. Almudena en tan solo un par de rondas ya le pilló el aire al juego, pero como suele ocurrir en las primeras partidas, no sabía muy bien por dónde empezar.
La partida transcurrió sin mucho 'puteo', tal y como le gusta a mi mujer, y al final el resultado fue de victoria mía por un solo punto sobre mi mujer. Almudena quedó un tanto lejos, pero se lo pasó muy bien, la verdad.
La otra partida jugada el 12 de Julio fue con Antonio, Nino, Ana y yo. Ganó Ana.
¿De qué va el juego te preguntas?
Reglas: https://drive.google.com/file/d/1-e75f9-rNzkYdlD1qkyjPLjTU2i6RGOZ/view?usp=sharing
Pues básicamente de completar recorridos de tren conectando ciudades, en un tablero bastante grande que representa a Europa, mientras tus contrincantes intentan hacer lo mismo. A destacar la maravillosa colocación de Barcelona en Valencia o Madrid casi en Cáceres.
Al principio del juego te entregan unas cartas que representan billetes de tren y que indican un origen y un destino. Los hay muy largos como Cádiz - Stockholm o más cortos como Barcelona - Munich.
Cada recorrido tiene un valor en puntos y si consigues conectar las dos ciudades, al final de la partida te sumas los puntos obtenidos, pero si no lo consigues, te los restas. Vamos que el que inventó el juego se ha chupado más test que yo que sé...
Además, hay cartas de varios colores - azul, negro, blanco, rojo, verde, naranja y rosa - con un vagón y también unas preciosas locomotoras que valen por cualquier color. Al principio del juego te dan 4 cartas.
El juego es muy, muy rápido y trepidante, ya que en tu turno solo puedes hacer una cosa de las siguientes...
Robar dos cartas
Coges dos cartas del mazo de cartas - ocultas - o bien escogiendo entre 5 cartas que hay descubiertas en la mesa. Si coges una descubierta, se repone por una del mazo. Puedes coger una del mazo y otra descubierta, o dos del mazo o dos descubiertas. Pero si coges la primera una locomotora descubierta ya no puedes coger otra, tu turno termina. No se puede coger una locomotora descubierta como segunda carta, pero te puede tocar del mazo, je je je y da una alegría...
A este juego le faltaría poder robar o comercial al estilo Catán. Yo creo que ganaría mucho. ¿Alguien lo ha probado?
Construir un tramo entre dos ciudades
Los recorridos entre dos ciudades están marcados por casillas de los colores anteriores y también las hay grises. De este modo, si quieres cubrir un recorrido con dos casillas rojas, tienes que entregar dos cartas de vagones rojos. Coges dos de tus 45 vagones y los colocas en las casillas rojas. Siempre puedes sustituir cualquier carta por una locomotora.
En ese momento puntúas. Cuanto más largo sea el recorrido, más puntos te dan, pero de manera exponencial, es decir, por 1 casilla, 1 punto, 2 casillas, 2 puntos, 3 casillas, 4 puntos y así hasta 21 puntos que es un recorrido muy jugoso y codiciado por todos los jugadores como método fácil de ganar puntos.
Cuando el tramo es de casillas grises puedes usar cualquier color, pero todas iguales y si hay un símbolo de locomotora, deberás entregar una carta de locomotora por esa casilla.
También hay tramos complicados que se representan con una especie de resalte en las casillas y simulan la construcción de un túnel. Ello implica sacar 3 cartas del mazo y por cada carta que coincida con el color de tu tramo, debes añadir una carta de ese color. Lo divertido del asunto es que tienes que aprovisionarte de cartas adicionales para hacer los túneles y, si no tienes suficientes cartas, pierdes tu turno.
Coger nuevos billetes de recorrido
En cualquier turno puedes pedir 3 nuevos billetes y quedarte al menos con uno. Es una jugada arriesgada, pero hacia el final de la partida, no es difícil completar algunos recorridos, sobre todo si has construido el más largo.
Construir una estación
Una estación se utiliza cuando ya no tienes forma de llegar a un destino pues alguien ha ocupado el último tramo de un recorrido con los trenes de un contrincante. Colocas una estación y puedes usar ese recorrido como tuyo. Lo malo es que gasta un turno y penaliza al final de la partida, vamos, que resta puntos...
Y poco más. Bueno, sí, también hay 10 puntos para el que tenga la ruta consecutiva más larga. Este es un punto clave de la partida y muchas partidas se resuelven gracias a estos 10 puntos. De hecho, evitar que los contrincantes enlacen muchos recorridos seguidos es una de las claves.
Y así es como quedó la partida...
Y así la feliz ganadora y su mascota 'Chinchi', una chinchilla la mar de marchosa...
Bueno, en conclusión, uno de los mejores juegos de iniciación que he encontrado. Este fue uno de los primeros que me compré, a pesar del precio, unos 45€. Es para 2 a 5 jugadores.
Lo compré hace más de 5 años y sigue viendo mesa con gran éxito. Además existen diferentes mapas y expansiones oficiales y no oficiales muy interesantes. Si buscas un poco, encontrarás una versión de Castilla y León muy muy currada. A ver si un día de estos me lo curro y me imprimo el tablero.
Bueno, hasta otra...
Pues básicamente de completar recorridos de tren conectando ciudades, en un tablero bastante grande que representa a Europa, mientras tus contrincantes intentan hacer lo mismo. A destacar la maravillosa colocación de Barcelona en Valencia o Madrid casi en Cáceres.
Al principio del juego te entregan unas cartas que representan billetes de tren y que indican un origen y un destino. Los hay muy largos como Cádiz - Stockholm o más cortos como Barcelona - Munich.
Cada recorrido tiene un valor en puntos y si consigues conectar las dos ciudades, al final de la partida te sumas los puntos obtenidos, pero si no lo consigues, te los restas. Vamos que el que inventó el juego se ha chupado más test que yo que sé...
Además, hay cartas de varios colores - azul, negro, blanco, rojo, verde, naranja y rosa - con un vagón y también unas preciosas locomotoras que valen por cualquier color. Al principio del juego te dan 4 cartas.
El juego es muy, muy rápido y trepidante, ya que en tu turno solo puedes hacer una cosa de las siguientes...
Robar dos cartas
Coges dos cartas del mazo de cartas - ocultas - o bien escogiendo entre 5 cartas que hay descubiertas en la mesa. Si coges una descubierta, se repone por una del mazo. Puedes coger una del mazo y otra descubierta, o dos del mazo o dos descubiertas. Pero si coges la primera una locomotora descubierta ya no puedes coger otra, tu turno termina. No se puede coger una locomotora descubierta como segunda carta, pero te puede tocar del mazo, je je je y da una alegría...
A este juego le faltaría poder robar o comercial al estilo Catán. Yo creo que ganaría mucho. ¿Alguien lo ha probado?
Construir un tramo entre dos ciudades
Los recorridos entre dos ciudades están marcados por casillas de los colores anteriores y también las hay grises. De este modo, si quieres cubrir un recorrido con dos casillas rojas, tienes que entregar dos cartas de vagones rojos. Coges dos de tus 45 vagones y los colocas en las casillas rojas. Siempre puedes sustituir cualquier carta por una locomotora.
En ese momento puntúas. Cuanto más largo sea el recorrido, más puntos te dan, pero de manera exponencial, es decir, por 1 casilla, 1 punto, 2 casillas, 2 puntos, 3 casillas, 4 puntos y así hasta 21 puntos que es un recorrido muy jugoso y codiciado por todos los jugadores como método fácil de ganar puntos.
Cuando el tramo es de casillas grises puedes usar cualquier color, pero todas iguales y si hay un símbolo de locomotora, deberás entregar una carta de locomotora por esa casilla.
También hay tramos complicados que se representan con una especie de resalte en las casillas y simulan la construcción de un túnel. Ello implica sacar 3 cartas del mazo y por cada carta que coincida con el color de tu tramo, debes añadir una carta de ese color. Lo divertido del asunto es que tienes que aprovisionarte de cartas adicionales para hacer los túneles y, si no tienes suficientes cartas, pierdes tu turno.
Coger nuevos billetes de recorrido
En cualquier turno puedes pedir 3 nuevos billetes y quedarte al menos con uno. Es una jugada arriesgada, pero hacia el final de la partida, no es difícil completar algunos recorridos, sobre todo si has construido el más largo.
Construir una estación
Una estación se utiliza cuando ya no tienes forma de llegar a un destino pues alguien ha ocupado el último tramo de un recorrido con los trenes de un contrincante. Colocas una estación y puedes usar ese recorrido como tuyo. Lo malo es que gasta un turno y penaliza al final de la partida, vamos, que resta puntos...
Y poco más. Bueno, sí, también hay 10 puntos para el que tenga la ruta consecutiva más larga. Este es un punto clave de la partida y muchas partidas se resuelven gracias a estos 10 puntos. De hecho, evitar que los contrincantes enlacen muchos recorridos seguidos es una de las claves.
Y así es como quedó la partida...
Y así la feliz ganadora y su mascota 'Chinchi', una chinchilla la mar de marchosa...
Bueno, en conclusión, uno de los mejores juegos de iniciación que he encontrado. Este fue uno de los primeros que me compré, a pesar del precio, unos 45€. Es para 2 a 5 jugadores.
Lo compré hace más de 5 años y sigue viendo mesa con gran éxito. Además existen diferentes mapas y expansiones oficiales y no oficiales muy interesantes. Si buscas un poco, encontrarás una versión de Castilla y León muy muy currada. A ver si un día de estos me lo curro y me imprimo el tablero.
Bueno, hasta otra...